domingo, 14 de octubre de 2012

Balance de la última asamblea docente de Filosofía y Letras

El pasado martes 9 de octubre se realizó en nuestra facultad una asamblea docente que discutió dos puntos importantes en la agenda de nuestros reclamos: la regularización salarial y el nuevo edificio a construirse en la calle Bonifacio. Con la participación de unos treinta compañeros, la misma se llevo a cabo en el marco del plan de lucha de 72 hs impulsado por la CONADU Histórica.

“Regularización salarial”.

Como ya expresamos en nuestro comunicado anterior, la campaña por la “regularización salarial” (es decir, una campaña para que todos los docentes cobren el salario que les corresponde, terminando con los precarios, “inadecuados” y ad honorem) se encuentra hoy en un impasse. La lista Violeta, actual mayoría en AGD-Filo, en ningún momento se decidió a tomar la iniciativa para impulsar una movilización docente que exija a las autoridades lo que nos corresponde como trabajadores de la educación. Sus propuestas se limitaron a la presentación de un proyecto al Consejo Directivo: la realización de una jornada de agitación y difusión en el primer cuatrimestre fue una propuesta de la Agrupación Naranja que la Violeta acompañó a desgano.

En la última asamblea la Violeta no mostró una posición diferente. Su única propuesta fue ponerle fecha a una muy retrasada movilización al Rectorado para “llevar” la resolución ya aprobada por el Consejo Directivo de Filo que pide un aumento en la partida de salarios para el presupuesto de nuestra facultad. La mayoría de AGD Filo no propuso, al margen de eso, ninguna medida de lucha, organización ni información. Desde la Naranja planteamos nuestra caracterización sobre los límites que ha tenido la campaña hasta el momento: si bien no existe ninguna “receta” para obtener un éxito en nuestras reivindicaciones, es claro que la AGD tiene como tarea impulsar el debate, la participación y la movilización de los docentes, ya que solo si los mismos afectados se involucran e impulsan medidas de lucha podremos obtener una satisfacción a nuestros reclamos. En este sentido, y considerando además que el Consejo Superior y el Rectorado no han mostrado ninguna voluntad de terminar con la precariedad salarial y por ello difícilmente aprobarían un aumento de presupuesto unilateral para nuestra facultad, propusimos acompañar esa movilización con un relanzamiento de la campaña de difusión y agitación en la facultad y en vínculo con toda la UBA. A propuesta de la Naranja fue aprobada la convocatoria a una comisión especial de docentes ad honorem y precarios de Filo (será el 23 de octubre), para nuclear a todos los compañeros con problemas salariales que tengan iniciativas y deseos de organizarse para defender nuestros salarios y conquistar otros nuevos.

A la cantidad de precarios, inadecuados y ad honorem (que hoy superan los 600 casos en una planta no mucho mayor a 2.000 cargos) se le deben agregar los casos de los 300 compañeros/as monotributistas del Laboratorio de Idiomas. En una situación de mayor inestabilidad que los docentes de las carreras, los compañeros del Laboratorio deben enfrentar no solo una permanente inestabilidad laboral sino ahora incluso un recorte en sus salarios debido a que la apertura o cierre de cursos depende de la oferta y demanda y una reducción en la inscripción redunda en una pérdida de ingresos para los docentes. Frente a esta realidad y a amenazas recientes de reducción de horas y de salario los integrantes de la Naranja planteamos la importancia de que la asamblea docente de Filo diese un fuerte apoyo a los compañeros del Laboratorio, reafirmando y dejando claro a la gestión la unidad de todos los docentes de la facultad, sean de las carreras o del Laboratorio, y nuestra oposición a que sufran cualquier deterioro o trato diferenciado que empeore sus condiciones de trabajo. Bajo la atenta mirada de la directora del Laboratorio y otros miembros de la gestión que estuvieron presentes en la asamblea, la Violeta se esforzó por diferenciarse de nuestra propuesta, señalando que “no hacía falta” aclarar que los docentes del Laboratorio son docentes de la facultad porque “ya se sabe que eso es así”, y sin plantear ningún posicionamiento en defensa de sus salarios y estabilidad. Ante nuestra insistencia en que, en este contexto de amenazas de recortes salariales, era fundamental un pronunciamiento de la asamblea que sirva como un apoyo a los docentes del Laboratorio en sus discusiones con la gestión, y luego de un debate, logramos que se apruebe por unanimidad la propuesta redactada por la Naranja, que señala que “la Asamblea de docentes de Filo apoya y se solidariza con los reclamos de los/as compañeros/as del Laboratorio de Idiomas, en tanto docentes de la facultas, reclama por su estabilidad laboral y rechaza cualquier recorte o deterioro en sus salario y condiciones de trabajo.”

Edificio

El otro punto en el temario se refirió al problema del edificio y, particularmente, al pedido de financiamiento para su construcción. En nuestras distintas intervenciones desde la Naranja expusimos la necesidad de que se pida el financiamiento total para la construcción del nuevo edificio y las reformas necesarias. Comedor universitario, guardería, edificio integrado, son algunas de las demandas que logró arrancarle el movimiento estudiantil a la gestión con la toma de 2010. Sin embargo la propuesta conjunta de la gestión y de la Lista Violeta deja de lado el financiamiento para comedor y guardería así como las reformas necesarias en el edificio actual para concentrarse solo en el financiamiento para el nuevo edificio (ver nuestro boletín del mes de septiembre). Desde la Naranja propusimos elevar un único pliego exigiendo el financiamiento para la totalidad de la obra. La moción que resultó triunfante, impulsada por la Violeta y que contó con el apoyo de los miembros de la gestión que se habían hecho presentes, representa un paso atrás en la histórica tradición de lucha conjunta entre la AGD Filo y el movimiento estudiantil, en tanto defiende explícitamente la división del pedido presupuestario en diferentes etapas. Un tema se agregó en el punto sobre edificio y estuvo referido a la discusión por el uso de los espacios del nuevo edificio. En el debate se llegó a la resolución de no distinguir usos entre grado, posgrado y extensión, pero aclarando que ninguno de estos espacios sea para actividades aranceladas, recuperando lo discutido en las asambleas de 2010, dado que ese es el eje del legítimo reclamo del movimiento estudiantil y no una oposición caprichosa a las actividades de posgrado. Sin embargo en las resoluciones la lista Violeta optó por omitir este renglón. El “olvido” no es casual: en ningún momento de la discusión se les ocurrió plantear la gratuidad de estos espacios y le hacen el juego a la gestión K de la facultad en su búsqueda por fondos propios para no enfrenten la política de vaciamiento de las universidades.

Reglamento para el ingreso de interinos. Meter por la ventana, lo que no entra por la puerta.

La lista Violeta introdujo sobre tablas a la asamblea la propuesta de discutir la elaboración de un “reglamento” para el ingreso de docentes interinos a la planta de la facultad. Se trata de un punto prioritario en la política de la gestión que busca regular el ingreso de nuevos docentes (pocos y de ellos); en este sentido representa un salto más en la adaptación de la actual mayoría a la línea e iniciativas de la propia gestión de la facultad. Por otra parte, a la hora de tratar el punto se pasó de “abrir la discusión” a plantear “que la asamblea mandate a la comisión directiva (donde tiene mayoría la Lista Violeta) la realización de un reglamento”. Desde la Naranja nos opusimos a esta maniobra. En primer lugar porque creemos que la preocupación más inmediata de un gremio es que dejen de existir trabajadores interinos y no el ver cómo cortamos las posibilidades de ingreso de estudiantes y graduados a la planta docente. En segundo lugar, porque la aplicación del reglamento de interinos en diversos departamentos ya ha provocado incontables injusticias y hasta despidos. En tercer lugar, y fundamental, porque en todo caso se debe abrir el debate sobre este punto, consultando su opinión al conjunto de los docentes y abriendo un debate al respecto. Creemos que este debate amerita que sea tratado como un punto central en una asamblea convocada a tal fin y debemos incluir a graduados y estudiantes en una problemática que los aqueja particularmente. A partir de nuestros señalamientos, y dado lo avanzado de la hora, se votó finalmente formar una comisión que comience a discutir el problema.

Tres problemas y una solución.

Los reclamos por el salario, el edificio y los interinos están vinculados. El crecimiento de la planta docente está muy por detrás del crecimiento de la planta de estudiantes y graduados. La carencia presupuestaria nos obliga a exigir dinero para salarios genuinos para todos los docentes, incluidos los del Laboratorio, y también para los futuros docentes que ingresen a la facultad para cubrir múltiples necesidades académicas y pedagógicas. La “regularización salarial” es fundamental para asegurar la estabilidad laboral, ya que debe permitir dotar de nombramiento regular a todos los docentes que hoy son interinos. A más estudiantes, graduados, investigadores, más espacios se requieren para concretar nuestras tareas, por lo cual se torna clave la pelea por un edificio integrado y que cuente con todos los espacios que son parte de las demandas históricas del movimiento docente y estudiantil.
No exigir con firmeza el salario para todos, preocuparse por controlar el ingreso interino a la planta docente antes que por exigir la regularización de todos los compañeros y la creación de más cargos, no reclamar que el nuevo edificio incluya todas las reivindicaciones impulsadas históricamente por el movimiento estudiantil y docente… Se trata de una política, la de la Violeta, que se limita, en el mejor de los casos, a tratar de poner parches a una política universitaria que ha colapsado. La política de gestión y de administración de la pobreza que nos quieren imponer la lista Violeta y la gestión nos lleva a un callejón sin salida. Es por eso que desde la Agrupación Naranja invitamos a todos los docentes a incorporarse al debate, participar en las movilizaciones por nuestros reclamos y sumarse a nuestra Agrupación para poder enfrentar esta política administrativista.

Basta de trabajo gratuito.

Ningún docente sin el salario que les corresponde

Por un edificio único, integrado y que cumpla con todas las demandas de los trabajadores y estudiantes de Filo.

Por un ingreso y carrera docente que aseguren la estabilidad, los derechos laborales y la autonomía de los docentes frente a las autoridades.

Triplicación del presupuesto universitario.

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